Negocios para Emprender en la incertidumbre ¿Cómo avanzar?

Según el observatorio de ManpowerGroup y su más reciente estudio ‘El mundo del trabajo en tiempos del COVID-19’, no hay sectores inmunes a la pandemia. “Las empresas tuvieron que revisar los procesos organizacionales tradicionales, incluso en cuestión de horas, para gestionar las consecuencias en las operaciones y, por ende, en toda la cadena de valor”, menciona el informe.

Y es que en una economía que el año pasado registrará la peor recesión en la historia de Colombia, con una contracción entre el 5,5% y el 10%, los emprendimientos y las empresas jóvenes de América Latina y el Caribe (ALC) se encuentran entre los grupos más afectados.

Así lo reveló una encuesta del BID y el Programa de Desarrollo Emprendedor (Prodem) de la Universidad Nacional de General Sarmiento de Argentina, realizada a 2.232 emprendedores y 429 organizaciones de los países de la región. Frente a la crisis, los emprendedores están respondiendo con una gestión de caja muy ajustada, posponiendo pagos a terceros y a los socios, a la vez que solo una minoría ha logrado implementar el teletrabajo, reseña el documento. Las limitaciones son tanto organizacionales como personales y familiares, explica el BID en su estudio ‘Los Ecosistemas de Emprendimiento en América Latina y el Caribe frente al COVID 19’.

Según un análisis del Global Entrepreneurship Monitor, GEM, aunque algunos emprendedores han crecido durante la crisis sanitaria, un importante número de micro y pequeñas empresas han sido obligados a cesar sus operaciones y/o cerrar definitivamente una vez que agotaron su colchón de liquidez. “El impacto ha demostrado ser más fuerte entre los informales y relativamente poco calificados empresarios. El gobierno colombiano ha proporcionado algún alivio financiero pero, según todos los informes, todavía parece ser insuficiente”, agrega.

El vaso medio lleno

No todo es malo e invita a ver el vaso medio lleno, en lugar de medio vacío. Según el mismo reporte del GEM, el pensamiento emprendedor se vuelve más crítico que nunca en tiempos de crisis global, ya que las oportunidades surgen de la incertidumbre y dan paso a diferentes modelos de negocio, nuevos productos o servicios y prácticas innovadoras.

“Algunas empresas bien conocidas y exitosas hoy se lanzaron después de la crisis financiera mundial de 2008-2009 (conocida como la Gran Recesión), incluidas Groupon, Uber, WhatsApp, Slack, Venmo y Airbnb, por nombrar algunas”.

Algunas de las características de esa nueva normalidad son el trabajo remoto, la disminución de los viajes de negocios y el lento crecimiento de los eventos presenciales, lo cual plantea retos pero también oportunidades para emprendedores dispuestos a sacarles jugo y a plantear nuevas ideas de negocio.

“Las empresas que se van a recuperar más rápido son las que son más flexibles y creativas”, dice John Friedman, profesor de Economía en la Universidad de Brown y codirector de “Opportunity Insights” en la Universidad de Harvard.

“Estas empresas necesitan encontrar formas de mantenerse fieles a su competencia central, pero tal vez entregarla de una nueva forma”, explicó Friedman a la revista Inc. “Las pequeñas empresas, debido a que pueden ser más ágiles en la respuesta, pueden estar mejor posicionadas para cambiar el enfoque de esta manera”.

Por su parte, Javier Echeverri Hincapié, presidente de ManpowerGroup Colombia, sostiene que el desafío y el cambio serán importantes para las pymes, ya que solo el 12% tenía proyectos de trabajo remoto estructurados antes de la crisis. “Una vez finalizada la emergencia, quedará un legado sobre el cual construir una forma de trabajo más cercana de las necesidades de las personas, superando las barreras físicas, y sobreponiendo el equilibrio entre la vida laboral y la sostenibilidad ambiental”, sostiene el experto.

Así mismo, para Echeverri, la revolución de habilidades en la que se encontraba el mercado laboral hace un tiempo, se ha acelerado debido a la combinación de situaciones que se viven globalmente.

Claves para el trabajo remoto

Según un estudio de la Federación Colombiana de Gestión Humana, ACRIP, el trabajo remoto ha aumentado un 400% desde el inicio de la pandemia y alrededor del 70% de las empresas planea conservar la modalidad de trabajo remoto una o dos veces por semana.

Pero teletrabajar plantea desafíos para las empresas y los trabajadores. Trabajar en remoto puede ser una experiencia tan poderosa como transformadora. Sin embargo, trabajar bajo una modalidad intermedia usualmente no funciona porque carece de un compromiso completo. “Las empresas que quieren triunfar deben privilegiar el trabajo remoto y asumirlo al 100%”, explica Alexander Torrenegra, un emprendedor serial colombiano que cuenta con más de 15 años liderando equipos remotos en el mundo.

Torrenegra lanzó recientemente su libro “REMOTER: La guía para construir y escalar equipos remotos exitosamente", que escribió con su socio Andrés Cajiao. En el libro describe los factores de éxito cuando se toma la decisión de trabajar en forma remota -de manera permanente- en una compañía, entre los cuales se destacan los siguientes:

• Los primeros que deben aplicar el trabajo remoto son el CEO y el Gerente de Recursos Humanos para transmitir a través del ejemplo.
• Todos los empleados necesitan un espacio alejado de las distracciones familiares para que puedan cumplir con su trabajo. Y deben ser capaces de soltar el trabajo cuando lo necesiten para no terminar quemados.
• La celebración del trabajo exitoso es vital. Cada integrante del equipo necesita saber que es valorado y respetado, esto no se puede dar por sentado.
• Los trabajadores tienen que ser hábiles con la tecnología. Es necesario que ellos se sientan cómodos y manejen a la perfección canales como Slack, Trello, Google Drive y Docs, y otras aplicaciones de este estilo.
• Métodos de medida como las ‘horas/silla’ son poco efectivas y es mejor liderar y medir con base en los resultados.
• La diversidad es importante. Un estudio de McKinsey & Company encontró que las empresas diversas son un 35% más propensas a generar ingresos y rendimientos de calidad por encima del promedio.